EL GANADOR SINIESTRO DE LAS GUERRAS MUNDIALES (Parte 2)

¡Comparte este contenido!

Por: Luis de Luna

Nuevamente estimados lectores de El Tribuno me contacto con ustedes con el fin de dar continuidad al tema que nos ocupó el número pasado, en el que abordamos la crisis creada por el imperialismo en Medio Oriente. Ya establecimos que la verdadera intención del conflicto fue aprovechar el espacio dejado por el Imperio Otomano y reacomodarlo, dentro del nuevo orden mundial posterior a la Segunda Guerra.

Inicialmente debemos entender que en este nuevo acomodo mundial había nuevos invitados, (los EE.UU. y la URSS), quienes representaban distintos intereses, claramente antagónicos y que iban a significar, nuevas formas de confrontación en el mundo: el Socialismo y el Capitalismo.

Recordemos que en 1947 una vez que la ONU decidió dividir el territorio palestino, para introducir al Estado de Israel, estableció, de manera ventajosa, que el 55% del espacio sería para Israel, aun sabiendo que eran minoría.

La respuesta de los árabes, no únicamente los palestinos que ahí residían, fue inicialmente de inconformidad y, posteriormente, se convirtió en hostil y violenta.

Debemos de remarcar que esta zona, al finalizar la Primera Guerra, fue controlada por Francia e Inglaterra, quienes la repartieron en su beneficio, formando nuevos países subordinados a ellos, los que ante esa naciente distribución política, quedaron desconectados, desorganizados y dependientes a ellos.

Por esta razón podemos explicarnos, que esos nuevos países como Jordania, Siria e Irak, y encabezados por Egipto, intentan expulsar a Israel y les declaran la guerra en 1948.

Pero no pueden concretar su intensión y son derrotados fácilmente. Lo que provocó que aproximadamente dos tercios de la población palestina, huyera o fuera expulsada a vivir como refugiados en: Líbano, Siria, Jordania, la Franja de Gaza y Cisjordania.

Los invasores en esta acción, fueron apoyados militar y logísticamente por las potencias imperialistas, logrando así, lo que ellos llamaron su Independencia el 14 de mayo de 1948. Esta independencia inmediatamente fue reconocida por todas las potencias, incluso logrando que este territorio inicialmente asignado, creciera para Israel.

Las acciones militares continuaron en la zona por ambos bandos. Ya para 1952, dentro de los pueblos árabes, se desarrolla un profundo nacionalismo, que en Egipto lo encabeza Gamal Abdel Nasser. Quien organiza un golpe de Estado contra el rey Faruq I, proclamando la República de Egipto. También diseñó una política antiimperialista y panárabe de inclinación hacia el socialismo. Esta acción representa la primera señal “de la guerra fría en la zona”.

Para 1956, toma Nasser la decisión de nacionalizar el Canal de Suez, provocando la furia de las dos potencias Inglaterra y Francia, quienes conjuntamente con Israel, le declaran la guerra.

Los aliados con sus fuerzas, rápidamente llegan a la zona del Canal de Suez, quedando el cuatro de noviembre la península del Sinaí en su poder.

La sorpresa en el conflicto fue, que la presión de EE.UU. y la URSS fueron contrarias a esta triple alianza, deteniendo en 1957 el ataque. Esto es una clara muestra de que Inglaterra y Francia habían dejado de ser las potencias de antaño. La Paz fue respaldada por La ONU con un grupo especial, la UNEF (Fuerza de Emergencia de las Naciones Unidas).

Con una nueva distribución en la zona, los EE.UU. apoyan ahora ya abiertamente militar y logísticamente a Israel en ese expansionismo. Como respuesta de la contraparte, los palestinos se organizan y crean la OLP, el 2 de junio de 1964.

El objetivo de esta organización era crear un grupo que se erigiera como gobierno de los refugiados palestinos, que declararían una guerra sin cuartel a Israel hasta expulsarlos de su territorio. Las armas a los árabes eran suministradas por la URSS desde los años 50 como una respuesta solidaria para contrarrestar la intervención americana.

Así, toda la zona estaba sumamente agitada, por lo que en 1967, nuevamente Egipto, Siria, Jordania e Irak, van a la guerra contra Israel, la que se conoce como “La Guerra de los 7 Días”, en donde de manera estrepitosa, otra vez, son derrotados. A partir de este momento, los intereses de los distintos países árabes derrotados, empiezan a atender visiones nacionales y la guerra palestina va quedando aislada.

Paralelo a ello da principio una nueva forma de guerra, la ideológica a nivel mundial. Gracias al uso de toda la maquinaria mediática del imperialismo, el pueblo palestino se trasforma en el símbolo del terrorismo internacional, siendo estigmatizados de manera inmisericorde. Se convierten sus pobladores, de patriotas defensores de su tierra, en irreflexivos, salvajes y fanáticos enemigos de la libertad y de occidente, logrando persuadir a cientos de generaciones del mundo sobre este enfoque pernicioso.

Esta guerra militar y mediática, los va marginando hasta que ya minimizados, en 1993, firman los Acuerdos de Oslo, que los orilla oficialmente a reconocer el Estado de Israel, aunque unas cuantas facciones palestinas no lo aceptan y permanecen en la lucha contra ellos.

Es importante destacar que, aún después de esta injusticia, la lucha contra los pueblos árabes en Medio Oriente no termina, ya que el imperialismo, ahora con menor riesgo, desarrolla nuevos enemigos en la zona, (iraníes, iraquíes, sirios, etc.) para defender sus intereses de este espacio.

Por ello, compañeros, cuando tratemos de analizar la causa palestina no nos dejemos influenciar por esa guerra mediática sucia desatada en su contra, sino busquemos la explicación en los intereses económicos de las grandes potencias en esa zona.

Total Page Visits: 490 - Today Page Visits: 4
¡Comparte este contenido!
Construyendo Conciencias
Construyendo Conciencias
Artículos: 153